La ciudad de New York tiene bunkers subterraneos, con medicamentos y miles de provisiones caducadas desde hace decadas; almacenadas por el caso de que hubiera un ataque nuclear que nunca llego.
Miles de americanos, estiman que unos 200 000 tuvieron la posibilidad de construir bunkers subterraneos para protegerse de una tormenta nuclear, se hicieron muchas películas con este tema.
Aparentemente no existia un plan federal para sus construcciónes, pero estados y gobiernos coordinados con defensa civil planificaron salvar de esta forma a parte de su población, la cuestión es a cuantos hubieran podido hacerlo.